Vía Ferrata Senda do Santo, guía completa de la única vía ferrata de Galicia

Por Alejandra Ceballos

Si eres, como yo, de los que prefiere hacer planes al aire libre y buscar actividades para salir de la rutina, no te puedes perder la Vía Ferrata Senda do Santo, la única vía ferrata de Galicia. Este plan combina aventura, un pueblo donde disfrutar de una comida fantástica, vistas espectaculares desde un acantilado de 20 metros y, si aprovechas el día, puedes ir a San Andrés de Teixido, cuyo Santo, dicen, debes visitar en vida, de lo contrario tendrás que hacerlo de muerto reencarnado en animal. 

Tanto si quieres ir con tu pareja, con amigos, o te atreves a hacerlo tú solo, podrás contar con guías profesionales que te acompañarán a lo largo del recorrido y te darán todo el material de seguridad para que, aunque estés a muchos metros del suelo, no te sientas inseguro. 

Este planazo está a una hora y media de A Coruña en coche y se tarda entre dos y tres horas en completarlo, como mucho. Por lo que es posible decidirse y cambiar el plan típico de fin de semana por uno que seguro no olvidarás. Esto es lo que para mí es la guía completa, incluso te cuento a dónde hemos ido a comer. ¿Te animas?

¿Qué es una vía ferrata?

Las vías ferratas son rutas de escalada en las montañas, trazadas y equipadas con diferentes materiales instalados permanentemente para que los aficionados puedan atravesarlas sin previa formación, por su cuenta o acompañados de un guía. Eso sí, es indispensable que cuentes con  los elementos de seguridad necesarios: arnés, casco, guantes, disipadores, una línea de vida y mosquetones. 

Se comenzaron a crear en el siglo XIX, en Austria, cuando algunos aficionados al montañismo hicieron algunas de estas adaptaciones en los Alpes. Durante la Primera y Segunda Guerra Mundial se habilitaron con fines bélicos y estratégicos y, una vez terminadas las contiendas, se volvieron parques de diversiones para los más atrevidos. Actualmente en España hay más de 300, la mayoría en la costa del Sol, y se estima que la primera de ellas fue creada en 1881 en las montañas aragonesas. 

Vía Ferrata Senda do Santo

Via Ferrata Senda do Santo

¿Dónde se encuentra la única vía ferrata de Galicia?

La primera vía ferrata fue creada apenas en el 2022, en la sierra de la Capelada, Cedeira, un municipio costero de la provincia de A Coruña. Es conocido por sus acantilados, ubicados en el Geoparque de Cabo Ortegal. 

Esta formación montañosa, es parte de una cordillera producto del choque entre los supercontinentes del paleozoico Laurussia y Gondwana que desencadenó lo que hoy es el Geoparque, que abarca cerca de 630 kilómetros cuadrado. Además de estos impresionantes acantilados, emergieron a la superficie canteras de mármol verde, y unas impresionantes playas negras y rojas. Es el lugar perfecto para ubicar la Vía Ferrata Senda do Santo, de la que seguro te enamorarás. 

Se encuentra a 92 kilómetros de A Coruña y a solo 46 de Ferrol. Tendrás que tomar la E-70 hacia Narón, luego la AC-566 hacia Cedeira y, cuando pasas de largo el pueblo, coger la DP-2205 que te conducirá entre las curvas que bordean los acantilados hasta el punto de partida. Si vas con guía, ellos te darán un punto de encuentro, así que tranquilo.

Mi recomendación es que antes o después te des un paseo por Cedeira para aprovechar su gastronomía local y, además, te pases por la parroquia de Santo Andrés de Teixido, sin duda un pueblecito con encanto. 

Aquí te dejo otras excursiones para hacer por la provincia de A Coruña: Guía de las 30 excursiones mas top en la provincia de A Coruña

Mi experiencia en Vía Ferrata Senda do Santo

Debo admitirlo, este no es un paseo para cualquiera. Puede dar un poco de miedo la primera vez que lo haces y, aunque puede completarlo cualquier persona, en algunos momentos sí necesitarás tirar de tu fuerza para avanzar entre los diferentes obstáculos que hay en la montaña.

Yo siempre digo que la primera vez fui un poco engañada, era una cita con alguien que estaba conociendo y no podía decir que no, ni demostrar el miedo que sentí al ver lo lejos que estaba del suelo porque me daba un poco de vergüenza. Afortunadamente ese hecho, sumado a lo majos que fueron los guías conmigo, hicieron que sí o sí tuviera que terminar la ruta, con la satisfacción que da lograr culminarla. Me gustó tanto que regresé dos veces más (además me quedé con el chico) y estoy a la espera del verano para poder regresar. 

Vía Ferrata con empresa de turismo activo

En nuestro caso, siempre hemos hecho la experiencia con Orixen Action, una empresa de turismo de aventura que realiza diferentes actividades como barranquismo, waveski, paddlesurf y, por supuesto, la guianza en Senda do Santo. En nuestro caso nos acompañaron Daniel Pérez, técnico deportivo de barrancos y su compañero Juan Tejeiro, ambos encantadores. Te dan mucha tranquilidad, nos recuerdan que lo importante es pasárselo bien y se aseguran de echarte una mano cada que lo necesitas. Sin mencionar que hacen fotos muy chulas. 

Material necesario

Acordamos una hora en el punto de encuentro donde aparcamos los coches y allí comenzó la aventura. Primero nos entregaron los equipos: cascos, guantes, arnés, mosquetones y difusores (para que, si cayéramos, el descenso fuera lento) aunque vamos, que nunca he escuchado de que nadie haya caído. 

Duración

La duración con guía es de 1 a 2 horas o incluso algo más dependiendo del número de personas.

El camino hasta el pie de la via ferrata dura aproximadamente 10 minutos,  y otros 10 min de regreso. Nosotros tardamos en completar todo el recorrido algo más de 2 horas.

Recorrido vía ferrata Senda do Santo (k2-k3)

Caminamos cerca de 500 metros desde los coches hasta el inicio de la vía ferrata, alrededor de 10 minutos. Al llegar al pie de la roca, nos dieron todas las recomendaciones y comenzamos a subir. Se trata de una serie de grapas incrustadas en la roca con un cable de vida al cual asegurar el disipador. Iniciamos  con un ascenso de 17 metros y luego un tramo horizontal, también llamado travesía.

A continuación vino el primer momento “pánico”, el puente de mono: un cable de acero para apoyar los pies y uno para apoyar las manos justo con el vacío de 20 metros a tus pies. Yo lo hice de cara a la montaña porque me partía del susto, pero cuando repetí sí me atreví a mirar el acantilado. (Te dejo una foto).  

A continuación vino otra travesía horizontal, un puente escalera y posteriormente, un banco salido de la montaña para sentarse un momento y apreciar las vistas. El momento más “Instagram” de la travesía y, si no te estás muriendo de miedo, vale un montón la pena sentarse por unos segundos, respirar profundo, sentir el viento en el rostro y divisar el mar al fondo y los eucaliptos a tus pies. Este momento no tiene precio. 

Después del banco en las montañas, seguía una travesía atada a unas cadenas metálicas, luego tuvimos que superar otras pequeñas escaleras y, finalmente, llegamos a la cumbre, donde lo normal es hacerse fotos con los compis. Te prometo que por muy asustado que estés, al llegar al final, tendrás la sensación de que querrás aún más. 

Tramo de ampliación de la Vía Ferrata(K4)

En junio del 2023 se finalizó el primer tramo de ampliación, con una una tirolina de 60 metros y un tramo de la vía que tiene más dificultad. Para quienes deciden continuar, los guías ofrecen una cuerda de seguridad. Pero sin presiones. Si crees que ya es demasiado para ti, puedes regresar andando al terminar la tirolina.  

Dificultad de la Senda do Santo

Las vías ferratas se clasifican con complejidad de K1 hasta K6, la vía ferrata Senda do Santo es K2–K3 (dificultad moderada) hasta la instalación de la tirolina, el tramo que le sigue es K4 (dificultad alta) y, esperan poder ampliar un sector más de K5 para los más arriesgados, pero hay diferentes puntos en los que puedes decidir no continuar y regresar andando. 

Tanto si la haces completa, como si te vas un poco antes, tendrás muchos momentos de aventura, además de las vistas sobre los pinos y eucaliptos que lindan con el Atlántico. Unas panorámicas únicas que podrás disfrutar desde diferentes perspectivas y que seguro harán que este día con tus compis se quede en la memoria para siempre. 

Cuando llegas al final de la vía, regresas al punto donde estaban los coches en otra caminata de cerca de 15 minutos y, finalmente, es hora de poder comer y disfrutar de la zona.

Recomendaciones básicas para hacer la vía Ferrata Senda do Santo

• Trata de estar al día con el clima antes de ir. Los guías cancelarán tu actividad si hay mucha lluvia o viento pero, si quieres disfrutar al máximo, lo mejor será que también haga sol, para que no te pierdas las vistas. De lo contrario será complejo poder ver todo el esplendor de la costa.
• Lleva zapatillas de montañismo o similares, con las que puedas caminar el tramo por el bosque y que además no se resbalen en los obstáculos de la vía ferrata. 
• Duerme bien la noche anterior, no es una actividad para expertos, pero no deja de ser una actividad deportiva. 
• Ve acompañado. Seguro te lo pasas bien con los guías, pero con los compis siempre es mejor.
• Ve de mañana, así podrás disfrutar la comida en Cedeira y, no te subirás a la montaña empachado. 
• No te recomiendo la actividad si tienes miedo a las alturas.
• También, aunque no es obligatorio, es cierto que si estás en forma (basta que puedas levantar mancuernas) será mucho mejor, ya que tu propia fuerza te dará la confianza para escalar por las chapas de hierro.
• Disfruta, que para eso es la vida, y también este tipo de actividades. 

Comer en Cedeira

El recorrido tarda máximo, unas tres horas, si sois muchos, así que, como te dije al principio, podrías regresar a comer a casa, pero te aseguro que es mucho mejor si disfrutas del pueblo.

Si tu experiencia de la vía ferrata Senda do Santo es en la mañana, te recomiendo llegar a Cedeira con tiempo, y caminar bordeando la ría a lo largo del paseo marítimo y, para calentar motores ir a Momo, el que, para nosotros, es uno de los mejores cafés de Cedeira. Puedes pedir tés, chocolates, platitos de fruta o muesli, tostadas clásicas o algunas más dulces con nutella y plátano. También llevarte algunas de sus barras de chocolate bean to bar que están buenísimas. 

A continuación vas a la vía ferrata con tu descarga de adrenalina y, al regreso, es el momento perfecto para visitar La Taberna de Jojo: un bar y restaurante típico del pueblo donde sirven, a mi parecer, uno de los mejores cachopos que he probado, también un marraxo buenísimo. Puedes pedir también chupitos de pacharán, croquetas, chipirones y una buena caña que seguro te mereces después de sobrevivir a esta aventura. Eso sí, los fines de semana suele estar bastante concurrido, así que te recomendamos hacer una reserva previa. 

Si nada de esto te cuadra, puedes ir a Kilowatio, también uno de los bares más conocidos del lugar y con un marraxo muy famoso. Si te apetece algo más elegante, el restaurante Badulaque, es un poco más costoso que los anteriores, pero tienen un marisco fresco que te ponen en arroces o los cocinan a tu gusto.

Santo Andrés de Teixido

Si aún tienes tiempo, y ganas de más, puedes volver a subir al coche y recorrer la ruta de cerca de 10 minutos que te lleva a Santo Andrés de Teixido. Una parroquia de apenas 50 habitantes donde podrás encontrar artesanías locales, pequeñas calles peatonales de piedra, visitar la parroquia del santo, que además tiene unas vistas espectaculares al mar, y, si eres foodie como yo, aprovechar y comprar rosquillas en el puesto que hay a la entrada del pueblo.